ZAPOPAN, JALISCO.- Bajo el lema “¡Ser alegre es Cotidiano, soy joven salesiano!” cerca de 800 jóvenes de toda la república mexicana se unieron en el Encuentro Nacional del Movimiento Juvenil Salesiano los días 3, 4 y 5 de Noviembre.
El viernes 3 de Noviembre autobuses y vehículos provenientes de todo México llegaron al Colegio Salesiano Anáhuac Chapalita, quién fue sede de la jornada donde se tuvo una recepción muy especial con una temática de aeropuerto; staff, asesores, y todo el equipo de logística estuvieron vestidos de pilotos, aeromozas y señaleros. Incluso a todos los asistentes se les otorgó su “Pasaporte Salesiano” con el que tuvieron la oportunidad de trabajar, tener acceso a los alimentos, y hasta aquellos que recaudaron más de 6 sellos en las actividades recibieron un regalo sorpresa.

En este “vuelo” (llamado así por los organizadores) se contó con la asistencia de las cuatro provincias MME (México-México, Salesianas), MMO (México- Monterrey, Salesianas), MEM (México-México, Salesianos) y MEG (México-Guadalajara, Salesianos), así como de sus representantes salesianos quienes en diferentes momentos de la asamblea dirigieron mensajes significativos a todos los asistentes.

El Instituto Juan de San Miguel estuvo presente con 20 jóvenes acompañados por las sores.

Las dinámicas comprendieron momentos en comunidad llenos de alegría y baile, una descarga de energía invadió los escenarios del colegio sede. No podía faltar el canto lema “Ser alegre es cotidiano”, donde a través de las líneas se expresaba el carisma que Don Bosco dejó a la juventud salesiana.
Los bailes estuvieron presentes durante toda la jornada, uno que se popularizó en el gusto de todos fue “El motorcito” donde todos disfrutaron al máximo, ya que todas las canciones incluían ingeniosas coreografías.

El encuentro tuvo como eje fundamental los dos primeros núcleos de la Espiritualidad Salesiana: Siempre y Alegres. Con esto los talleres fueron pensados para enriquecer las dimensiones espiritual, física, intelectual y social que se experimentan en la vida del MJS, algunos títulos fueron “Lectio Divina”, “Elaboración de Catequesis”, “Danza Contemporánea”, “Circo Social”, “Manejo de Conflictos” entre otros.
Uno de los momentos más especiales fue la hora santa, donde todos los asistentes tuvieron la oportunidad de estar muy cerca con el santísimo, una hora llena de cantos y reflexiones que crearon un ambiente espiritual único.

Para la preparación final del encuentro se tuvo la asistencia de sacerdotes que estuvieron prácticamente de tiempo completo ofreciendo el sacramento de la reconciliación, antes de “aterrizar” la actividad final más importante: la Santa Misa presidida por el P. Hugo Orozco Sánchez, un espacio para agradecer a Dios por todo lo acontecido en el encuentro y donde la principal encomienda fue llevar lo aprendido a las obras salesianas locales.
